martes, 5 de febrero de 2008

Bosque...

Se escuchó un aullido que parecía un lobo hambriento de sangre.
La luna llena iluminaba aquel tenebroso bosque y los enormes árboles acariciaban al viento y protegían a los seres que habitaban allí...
Un enorme y elegante pájaro vigilaba y avisaba del peligro a otros animales.
Un disparo junto a un aullido ahogado se fundió en las palabras del viento.
Cada ser que vagaba por aquel lugar fue muriendo por cada disparo que se oía.
Aquel bosque se llenó de cuervos, aquel bosque dejó de tener vida sobre él...