Estábamos todos en aquel bar.
Todos decidieron jugar al billar o al futbolín, pero a mí no me apetecía y él decidiste hacerme compañía.
Estaba apoyada en la pared áspera y él te quedaste en frente de mí. Estuvimos hablando todo el rato y me hacía sonreír aunque yo no tenía muchas ganas de hacerlo….
Nos quedamos en silencio, ya no tuvimos nada que decir, me sentía extraña en ese instante de silencio pero de ruido por alrededor.
Nuestras miradas se cruzaban una y otra vez, sentía un impulso a abrazarle y sentir sus latidos, a sentir su calor pero rechazaba aquel impulso por miedo por todo.
No sé porque, pero en ese momento sentí como todas las personas que conocíamos los dos se nos quedaban mirando, pude que solo fueran dos personas contadas pero me sentía incómoda.
Me separé de la pared, mi corazón iba a cien por hora, pensaba que se iba a salir, pero no le miré a los ojos tuve miedo y no sabía porque.
Me giré para no verle y me fui hacia la puerta, él me siguió sigilosamente sin que yo me enterara.
Cuando estaba en la calle, me cogió del brazo e hizo que me girara y le mirara a los ojos. Mis lágrimas se habían apoderado de mi cara, me abrazó y me sentí resguardada de la noche fría.
La gente entraba y salía de aquel bar, pero para mí solo estábamos él y yo, sentí como tu me movías la cara y como sus labios fríos se decidían en besar los míos.
Y como sus brazos hacían que me ajuntara a su cuerpo…
Sentí como el móvil vibraba y cómo sonaba la música, lo cogí y vi:
“16/02/2008 07:10 Detener Repetir”
Ya había despertado de aquel sueño….ojala no hubiera terminado nunca…
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